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El objetivo de este artículo es mostrar algunos consejos para el cuidado de ancianos con movilidad reducida. Como siempre insistimos, este tipo de cuidados los deberían realizar personas especializadas como enfermeras, cuidadores geriátricos o auxiliares de enfermería especializados.

La lista de recomendaciones son las siguientes:

1.- Aseo diario de todo el cuerpo. Aunque el anciano presente movilidad reducida y su aseo sea más complejo, no debemos descuidar esta tarea.

2.- Revisar la piel del anciano por la mañana y por la noche para ver si presenta ampollas o heridas.

3.- Aconsejamos aprovechar la revisión de la piel del anciano para hidratarla.

4.- Proporcionar al anciano un calzado seguro y antideslizante. Este consejo también se extiende al cuidador del anciano.

5.- Proporcionar al anciano bastones y andadores para ayudar a su movilidad.

En el caso de que el anciano presente una movilidad más severa que afecte a las dos piernas o a los dos brazos os incluimos estas tres recomendaciones: